Me Besaste

Mi viaje incesante, mi búsqueda del placer de encontrar palabras y sentimientos, de esos que llegan al corazón, me ha llevado, en un viaje virtual, al Norte Grande de mi país, a esa bella ciudad que es Iquique, la cual tengo la dicha de conocerla por lo tanto comparto ese orgullo de esta autora de ser iquiqueña. Una ciudad mezcla de lo moderno con la historia viva que se palpa cuando uno recorre sus calles. He llegado a su blog para recorrerlo de principio a fin, y los invito a todos ustedes a hacer lo mismo, pues sus escritos bellos vale la pena leerlos. He elegido me besas (26/11/05) por lo encontré hermoso y lleno de intensidad y pasión.

Me besaste,

besaste palmo a palmo mis sentidos,

entraste en mis sueños y me hiciste tuya.

Me besaste
y sentí tus labios en mi cuerpo,
sentí tus besos en mi espalda, en mi pecho,
mi vientre, mis muslos, mis dedos.

Me besaste,
y llenaste cada poro de mi piel con tu esencia,
tocaste mis fibras mas internas,
corroíste la coraza de mi corazón
te adentraste en mis sentimientos
y
con tus besos,
besos de luna,
de sol,
de arena,
de mar,
de cordillera,
de silencios,
de sonidos,
de luces de ciudad,
de caminos de provincias,
armaste trincheras en mis puertos,
hiciste temblar mi centro
te ahondaste a mi abismo dulce y siniestro,
diestramente navegaste en sus olas
y en cada sumersión
arrancaste del lecho
peces de gemidos.

Me besaste
y con tus besos de media noche
despertaste a la hembra
ella se ha abalanzado,
en repuesta al estímulo
y te ha devorado
en los mismos besos
que tu le has dado.

Dominándote,
te beso entero,
te degusto,
saboreo, me relamo
y te poseo...
te amo,
me amas,
nos amamos.

Me has besado,
y disfruté cada beso,
cada entrada a mi alma,
cada respiro a mis entrañas...
te he besado
y como niño mimado te has dejado,
has recibido
cada una de mis húmedas caricias,
a mis labios sedientos te has entregado
y en tu piel
mi sed he saciado...
Te has atiborrado de la miel de mis deseos,
te has nutrido de mi abrazo.
de tanto besarnos nuestros labios se han llagado
sangrado de pasión
hervido en la lujuria.
Me has besado,
he despertado con la sensación acuosa,
con tus besos en mi piel,
con tu aroma en mi boca,
te tuve para mí,
pero sólo en los sueños dulces de mis noches de espera.

Por Carolina González Velásquez

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